martes, 20 de julio de 2010

CERRADO POR VACACIONES

Sé que debía haber hecho esto mucho antes pero el calor me tiene el cerebro derretido.

Hace tanto que no paso por aquí que ni siquiera recuerdo mi último post. Y es que, ahora que es veranito, no apetece nada en absoluto meterse en la cocina. A mi, al menos, me pasa. Así que tengo un tanto olvidado el tema de continuar aprendiendo a cocinar, como me propuse en su día.

Además, desde hace unos meses colaboro como redactora de moda para una publicación online lo que me ocupa bastante tiempo. Podéis leer mis artículos en www.neomoda.com.

Bueno pues, este post es sólo para despedirme hasta mi regreso, allá por el mes de septiembre. Espero que las vacaciones me sirvan para recuperar fuerzas y volver con energías renovadas, a ver si consigo hacer de este blog un lugar de referencia.
Espero encontraros a todos de nuevo a mi vuelta. Mientras tanto, pasadlo bien y disfrutad del verano!!



martes, 8 de junio de 2010

PASTEL DE CARNE

Buenas noches bloggeros!!

Como esta noche estoy sola en casa (mi marido tiene partido de fútbol en Barcelona) y la programación de la tele no me resulta del todo apetecible, he decidido escribir una nueva entrada que, seguro, sí lo será.

En el último post os hablé acerca de las fiestas que estos días se están celebrando en mi pueblo, Sant Sadurní d'Anoia, recordáis? Pues bien, ayer le tocó el turno a mi barrio, el de la "Diputació".

Como es costumbre en todos los barrios del pueblo, a media tarde se celebró una chocolatada para todo aquel que quisiera participar. El chocolate, que estaba buenísimo, fue preparado por una señora mayor, muy simpática y risueña, a la que, casualidades de la vida, conocería aquella misma noche.

Tras la chocolatada tuvo lugar la actuación de un dúo de payasos que entretuvieron a todos los niños con sus risas y cánticos. Los peques se lo pasaron en grande pero, aún más los mayores.

Después de tomar ese delicioso chocolate regresamos a casa para coger fuerzas para la noche, pues a las 22:30 iniciaban los fuegos artificiales y se quemaba la falla del barrio.

Poco antes de terminar de cenar recibimos una visita sorpresa: era Remei, una compi del taller de escritura, que no sólo nos obsequió con su presencia sino que además nos trajo un bonito cactus. ¡Me encantan los cactus! (aunque se me mueran todos...)

Como no quería molestar, y nosotros teníamos que terminar la cena, Remei se marchó enseguida pero quedamos en vernos durante la cremada.

Mi marido y yo bajamos a la calle muy emocionados porque íbamos a vivir las fiestas del pueblo con un lugareño y eso, cuando se trata de las primeras fiestas que pasas en tu nuevo hogar, se agradece.

Pero no encontramos a Remei. Tras dar varias vueltas a la manzana sin éxito, decidimos volver a casa pues, ya era tarde y, al día siguiente, había que madrugar.

Pero, oh sorpresa!! Remei llamó al timbre cuando ya me había puesto el pijama, nos esperaba en la calle y no aceptaba un "no" por respuesta. Así que me cambié y bajamos de nuevo.

Allí estaba, frente a nuestro portal, esperándonos con una sonrisa de oreja a oreja. Iba a presentarnos a parte de su familia, vecinos nuestros, que habían abierto las puertas de su casa para recibir a todo aquel que quisiera saludarles y para obsequiarles con coca, cava y otras viandas que habían preparado.

Y así fue como conocí a la amable anciana que nos había servido el chocolate sólo unas horas antes.

Se llama Obdulia y es tía de Remei. Obdulia nos abrió las puertas de su casa y nos recibió como a cualquiera de sus amigos o familiares que allí se encontraban. No nos faltó cava, ni coca y, mucho menos, conversación. Además, tuvimos el placer de conocer a uno de sus hijos, a su nuera y a otros amigos de Remei.

Qué ilusión me hizo. Fue un gran regalo. Gracias!!

Espero poder repetirlo el próximo año y ser yo, en esa ocasión, la que abra las puertas de su casa a todo el que quiera pasar.

Y con la misma ilusión quiero yo obsequiaros con una nueva receta, esta vez, y sin que sirva de precedente, de cosecha propia.

Ingredientes:

1/4 de Kg. de carne picada
2 huevos duros
Vino blanco
Tomate frito
Sal
2 masas de hojaldre

Elaboración:

En una sartén caliente echamos un chorro de aceite de oliva y freímos la carne picada, que habremos salado previamente. Una vez hecha la carne añadimos el tomate frito, a gusto, y dejamos que se mezcle bien junto con la carne.

A continuación, bañamos la mezcla anterior con un chorrito de vino blanco y agregamos los huevos duros, previamente cortados en pedacitos muy pequeños.

Mezclamos bien y dejamos que el vino reduzca. Sin dejar de remover para que no se pegue.

En la rejilla del horno, que habremos precalentado a unos 180 grados, colocamos una de las masas de hojaldre sobre papel de horno y pinchamos con un tenedor para que no se deforme la masa.

Incorporamos la carne picada sobre la masa de hojaldre y extendemos bien hasta cubrir toda la masa.

Cubrimos el resultado con la otra masa de hojaldre y cerramos los bordes dándole forma de canutillo. Pinchamos un poco la masa superior e introducimos en el horno.

Horneamos alrededor de unos 30 o 40 minutos, siempre vigilando para que no se nos queme.

Los que sois seguidores asiduos de mi blog sabréis que es la primera vez que escribo una receta de cosecha propia, aunque la idea surgió de la mezcla de diversas recetas que pude leer en la red, por lo que las cantidades están puestas a ojo y la redacción en el método de elaboración puede que no sea el más profesional y riguroso posible pero... Los que tengáis maña en la cocina estoy segura que no os supondrá ningún inconveniente llevar la receta a buen puerto.

Que vagi de gust!!

lunes, 7 de junio de 2010

APPLE CAKE

Hace ya un montón de días que no pasaba por aquí y no me lo perdono. Hago propósitos por ser más constante pero, como ya he comentado en otras ocasiones, la falta de una rutina diaria en mi vida me hace divagar en muchas ocasiones.

En fin, lo que importa es no abandonar. Y es que esta semana ha sido muy movidita, tengo la sensación de haber vivido más en Badalona que en Sant Sadurní.

Y, hablando de Sant Sadurní, esta semana se celebra en el pueblo la fiesta de "Els Barris" que, coincidiendo con la festividad del Corpus, es una de las más tradicionales de su calendario.

Las fiestas dieron comienzo el pasado 3 de Junio a las 14:00 de la tarde, con la tradicional tronada de inicio de fiestas. Los siete tradicionales barrios de la "vila" se van pasando el relevo cada veinticuatro horas con el grueso de fiestas que se repite cada día y que incluye actividades exclusivas para la gente del barrio y otras que son abiertas para todo el mundo. Entre las más tradicionales destaca "el rengle", una especie de pasacalles que conserva rituales como el de la "mantellina", el clavel, el bastón y la coca, así como músicas típicas y el clásico baile de la "mantellina".

Además, cada noche tiene lugar un castillo de fuegos artificiales y, en algunos barrios, como en el mío, el "Barri de la Diputació", se quema una especie de falla que han preparado los vecinos y que da comienzo a un baile que dura hasta que el cuerpo aguante.

Pero para mi lo mejor es la chocolatada que cada tarde se puede disfrutar en cada uno de los barrios. Mmmm, qué rico chocolate!!

Si os apetece podéis consultar la agenda de las fiestas en la web del Ayuntamiento: http://www.santsadurni.com/.

Bueno y ahora, con la mirada puesta en la que será mi próxima creación, o copia de alguna otra receta rescatada del ciberespacio, os dejo con esta deliciosa receta. Espero que os guste.

Ingredientes:

1 vaso de azúcar (250 gr. aprox.)
1 vaso de harina (250 gr. aprox.)
1 Kg. de manzanas golden
1/2 sobre de levadura
2 huevos
Mermelada de melocotón o albaricoque

Elaboración:

Pelamos y partimos las manzanas a trozos pequeños (reservamos una manzana para el final que cortaremos en finas rodajas)

Batimos los trozos de manzana junto con la harina y el azúcar.

Agregamos los huevos, la levadura y batimos hasta conseguir una masa homogénea.

Untamos un molde con aceite o mantequilla y avocamos en él la masa resultante que cubriremos con las rodajitas de manzana que cortamos anteriormente. Espolvoreamos los gajos de manzana con abundante azúcar e introducimos en el horno, a unos 200 grados, durante unos 30 o 40 minutos.

Cuando el bizcocho esté listo, encendemos el gratinador para caramelizar las manzanas.

Dejamos enfriar y, una vez frío, cubrimos con la mermelada del gusto que hayamos elegido.

Como veis, vuelve a ser otra receta de fácil elaboración y de exquisito resultado. Además los ingredientes son fáciles de conseguir, seguramente que siempre dispongamos de ellos en nuestras despensas por lo que cualquier momento es bueno para realizar la receta.

Que os aproveche y hasta pronto!!



jueves, 27 de mayo de 2010

LOMO CON ALMENDRAS

Estaba navegando por la red, descubriendo blogs de moda, otra de mis pasiones, leyendo interesantísimos artículos, y me ha entrado un mono horrible de escribir. No es que esté especialmente inspirada pero, mira, de repente me ha apetecido un montón. Así que, aquí estoy.

Esta semana ando algo cansada. Sé que no desarrollo una actividad frenética porque, el hecho de estar en paro, me permite hacer multitud de cosas pero, eso sí, a mi ritmo. Quiere decirse que si tengo que lavar ropa, limpiar la casa, salir a comprar, cocinar, etc. puedo repartirme las tareas en varios días para no estresarme demasiado. Si bien es verdad que, en ocasiones, se me pasan los días de balde delante de la pantalla del ordenador o, en su defecto, de la tele, la caja tonta.

Pero esta semana se me antoja agotadora. Y todo por culpa de los malditos zapatos que tenía que comprarme para combinar con el vestido que usaré el sábado, para asistir a la comunión del sobrino de mi marido, José Luis. El lunes de tiendas por Vilafranca, el martes por Badalona, después por Diagonal Mar... Coche arriba, coche abajo. El miércoles vuelve para Badalona. Uff, agotador, en serio.

Además, pensar en que mañana hemos de coger carretera y manta de nuevo dirección Motilla del Palancar (Cuenca), me fatiga.

En fin... No podemos librarnos, qué le vamos a hacer.

Y, así como esta semana ha sido un vaivén incesante de ires y venires, la receta que os presento hoy no lo es en absoluto.

Una noche había sacado del congelador filetes de lomo para cenar. El lomo siempre me ha resultado muy aburrido hecho a la plancha por eso procuro evitarlo en mi dieta pero, en esta ocasión, no tenía más remedio que cocinarlo. Eso, o tirarlo a la basura porque una vez descongelado... Ya se sabe. Y como no están las cosas como para andar tirando, decidí buscar por internet una receta que lo hiciera más apetecible. Así fue como encontré la receta de hoy.

Ingredientes:

Filetes de lomo (unos 4 por persona)
1 Cebolla
3 Ajos
Almendras picadas
1 pastilla de "Avecrem"
Azafrán
Perejil
1 cucharada de harina
1 vaso de Vino blanco
Vino dulce
Ginebra

Elaboración:

Se fríen los filetes de lomo y se reservan en una cazuela.

En el mismo aceite en que hemos frito el lomo, sofreímos la cebolla y un ajo sin pelar.

Añadimos más aceite si es necesario.

A continuación, trituramos la cebolla, el ajo frito pelado y dos ajos crudos, el avecrem, el azafrán, el perejil, las almendras y una cucharada de harina.

Vertemos la picada sobre los filetes de lomo y rociamos con un vaso de vino blanco, un chorreón de vino dulce y otro de ginebra.

Cubrimos con agua y los dejamos cocer a fuego lento hasta que reduzca y nos quede un salsa.

Veis, no es nada complicado, a pesar de llevar gran cantidad de ingredientes, la elaboración es rápida y sencilla.

Tengo que confesaros que, para variar, me faltaba algún que otro ingrediente pero, afortunadamente, no se notó en el resultado. Dejé de usar el vino dulce, la ginebra, el ajo y el azafrán, básicamente porque no contaba con dichos ingredientes en mi despensa. A pesar de su ausencia, el lomo resultó ser un éxito. Nunca más volveré a comer filetes de lomo aburridos.

Buen provecho!!

martes, 18 de mayo de 2010

PASTELITOS DE PERA Y NARANJA

Tengo el cuerpo baldado, podría decirse que me ha pasado una apisonadora por encima mientras dormía, pero no. Todo es consecuencia de mi última afición: hacer ejercicio con la Wii-Fit Plus. Y, claro, la falta de costumbre ha hecho que toda yo esté sumida en incesantes dolores que recorren mi cuerpo de pies a cabeza.

En realidad no hace tanto tiempo que dejé de ir al gimnasio, aunque, ahora que lo pienso con detenimiento... Irá camino de un año!! Claro, cursé una baja temporal justo antes de las vacaciones de agosto porque iba a pasar todo el mes fuera y, a la vuelta, sabía que el trabajo iba a ocupar gran parte de mi tiempo, ya que me vería obligada a realizar un sinfín de horas extras durante el mes de septiembre y, en octubre, me casaba con lo que... Tiempo para ejercitar mis músculos... Poquito.

Tras finalizar los tres meses que duraba la baja temporal, regresé al mundo de las máquinas y al fitness, pero duró poco. Sólo un mes después decidimos que íbamos a trasladarnos a vivir a Sant Sadurní d'Anoia, ese bonito pueblo del Penedès, que huele a chocolate durante todo el año y a mosto durante los meses de septiembre y octubre, época de vendimia y elaboración de vinos y cavas.

Así que me vi obligada, con todo el dolor de mi corazón, a cursar baja definitiva del que había sido mi gimnasio durante unos 9 meses. La idea era encontrar un nuevo sitio en el pueblo donde continuar poniéndome en forma pero, entre pitos y flautas... Llevo aquí 5 meses y aún no he mirado nada y, tras comprobar el éxito obtenido por mi maridito haciendo ejercicio con esa magnífica y sorprendente consola de videojuegos, decidí probar suerte y utilizarla para moldear mi figura, que con tanto bizcocho, pastelito y demás se estaba tornando un poco curva.

Y este ha sido el resultado. Un cuerpo machacado por el Kung-Fu Rítmico, el Boxeo, el Hula Hop, entre otros ejercicios de tonificación y equilibrio. Espero que, con el tiempo, el sacrificio valga la pena y recupere mi talla y, lo más importante, mis rodillas!!

Pero no puedo dejar de lado la misión que me ha traído hoy aquí que no es otra que agasajaros con otra deliciosa receta.

Ingredientes:

3 Peras
2 Huevos
100 gr. de azúcar
2 cucharadas de café de levadura
100 gr. de harina
Ralladura de piel de naranja
Zumo de media naranja
100 gr. de mantequilla fundida

Elaboración:

Primero, y muy importante, no olvidarnos de precalentar el horno a unos 180 grados y de preparar moldes individuales.

En un bol, batimos los huevos junto con el azúcar e incorporamos la harina y la levadura previamente tamizadas. A continuación, añadimos la ralladura de piel de naranja, el zumo y la mantequilla fundida.

Pelamos las peras y las cortamos en trozos.

Cubrimos el fondo de los moldes con los trozos de pera y los cubrimos con la masa elaborada anteriormente.

Horneamos durante unos 15 minutos.

Una vez listos dejamos enfriar antes de desmoldar con mucho cuidado, evitando que se rompan los pastelitos.

Como veis es una fácil receta, de rápida elaboración, pero con un excelente resultado. Los pastelitos quedan jugosos, gracias al zumo de naranja, y muy gustosos, gracias a los trocitos de pera.
Es importante, sobre todo, el último paso ya que si no se dejan enfriar lo suficiente, trozos de la masa pueden quedar adheridos al fondo del molde y, en el momento de desmoldarlos, se nos puede romper el pastelito. Como me ocurrió a mi con algunos de ellos. Pero es que no puedo evitarlo. Siempre que cocino algo nuevo no tengo la paciencia suficiente de esperar el tiempo necesario para probarlo, se genera una ansiedad en mi incontrolable. Y, claro, así me pasa. Se me rompen los pastelitos, me quemo los dedos al intentar coger el molde sin necesidad de manopla...
Espero que, gracias a mis percances, vosotros sepáis evitarlos.
Buen provecho!!

miércoles, 12 de mayo de 2010

QUICHE DE CHAMPIÑONES, CALABACÍN Y JAMÓN

Queridos amigos, creo que hoy es uno de esos días en los que te levantas porque hay que hacerlo y porque hay que plantarle cara a la vida y seguir hacia adelante sin dejar que las adversidades hagan mella en nosotros.

Tengo el humor como el día: a claroscuros.

Y aunque no me apetecía mucho escribir, por un momento me he parado a reflexionar y he buscado en mi interior encontrando la motivación necesaria para estar aquí con vosotros una vez más.

Dicha motivación no es otra que la ilusión que me hizo el otro día recibir un mensaje de una vieja amiga contándome que en su trabajo, durante el turno de noche, comentaban entre sus compañeros mis recetas y que, muchos de ellos, las cogían para hacerlas suyas, como hiciera yo en su momento.

Por otro lado, los ánimos que recibo, a través de internet, de otra vieja amiga y compañera de correrías de hace ya algunos años.

Va por vosotras, esta receta os la dedico hoy, Ana Mª y Maribel, por sacarme una sonrisa en momentos de flaqueza y en especial a ti, Maribel, por pasarme esta receta tan rica de la que jamás había oído hablar.

Ingredientes:

400 gr. de hojaldre
350 gr. de champiñones cortados en láminas
1 calabacín
1 tarrina de jamón en taquitos
25 gr. de mantequilla
3 Huevos
1 vaso de nata líquida para cocinar


Elaboración:
Se forra un molde, previamente engrasado, con la pasta de hojaldre y se pincha con la ayuda de un tenedor para que no se deforme la masa.

Salteamos los champiñones y el calabacín, cortado en rodajas, con la mantequilla y reservamos. Mientras se enfrían los champiñones y el calabacín, mezclamos los huevos con la nata y sazonamos. Incorporamos el jamón a la mezcla anterior y revolvemos bien.

Una vez fríos los champiñones y el calabacín, los disponemos sobre la masa, en el fondo, y vertemos sobre ellos la mezcla de huevos, nata y jamón.

Con la pasta de hojaldre sobrante cubrimos un poco la mezcla de ingredientes e introducimos al horno, que habremos precalentado a máxima temperatura, y horneamos hasta que el relleno se vea consistente y la parte superior esté dorada.

Listo para servir!!



Debo aclarar que, para poder preparar esta deliciosa quiche, tuve que ayudarme de una receta que encontré por internet ya que mi querida amiga Maribel no me especificaba cantidades y el orden en la preparación era un poco lioso. Como siempre, valiéndome de ambas recetas, elaboré mi quiche personalizada puesto que eliminé aquellos ingredientes que no me gustaban e introduje de nuevos.

El resultado fue espectacular aunque creo que le faltó un poquito de sal pero por lo demás... Estaba buenísima. Estoy segura que la repetiré a menudo.

Y para que no creáis que desconfié de forma gratuita de la receta de Maribel, a continuación podéis leer cuáles fueron sus indicaciones:

"La receta: para empezar decirte que yo lo hago todo "a ojo", pones en un molde la pasta quebrada (del Mercadona) cubres el fondo del molde (como si lo forraras por dentro) y le recortas un poco los bordes para que no sea muy hondo, las "quiches" son como de 2 dedos de alto, no tiene el grosor de una tortilla de patatas...aunque molaría...y con un tenedor le haces pinchazos para que la masa se haga bien. En un bol mezclas: 3 huevos o 4, nata líquida, sal, pimienta (poquita) y yo puse tacos de jamon york, queso rallado emmental y champiñones, tiene que quedar una masa espesa pero que puedas remover bien, lo echas al molde y le "cierras" un poquito los bordes a la masa, así para abajo...y al horno por arriba y por abajo a toda leche, si ves que se está torrando mucho lo de arriba lo bajas más abajo...en fin, me explico un poco mal, pero se entiende, no? Y eso es todo, hala guapa, a la cocina !!!"


Veis, tenía razón o no. Comprensible es, pero para una cocinera inexperta como yo le faltan datos. ¿Estaréis de acuerdo conmigo, no? El caso es que, fuera como fuese, la encontré deliciosa y decidí buscar apoyo en internet para completar los datos que me faltaban y llegar así a buen puerto.

Recordad lo que siempre os digo: En la cocina, recursos.

Que vagi de gust!!


miércoles, 5 de mayo de 2010

STRAWBERRIES CAKE

No quiero continuar escribiendo este blog sin antes realizar una pequeña aclaración: las recetas que aquí os encontráis no son de cosecha propia. Ya me gustaría, ya. Son recetas que he encontrado navegando por la red o que he tomado prestadas de algunos de los blogs de los que soy seguidora. No quisiera que nadie se sintiera plagiado por mi causa. El número de recetas que te puedes encontrar navegando por Internet es infinito y, en ocasiones, se repiten en diferentes páginas por eso jamás he creído que estuviera haciendo algo malo.

Mi intención era, y sigue siendo, aprender a cocinar así que elijo recetas que me resultan atractivas a la vista y que, sin duda, también lo son al paladar, así como recetas de fácil elaboración, para ir progresando y aumentando en dificultad poco a poco.

Aunque si hay algo de lo que pueda arrepentirme a estas alturas es, sin duda, de haber concebido este blog como un recetario de anécdotas culinarias.

Últimamente, mi relación con los fogones marcha viento en popa a toda vela, ya no soy víctima de los percances de antaño, cuando se me quemaba la comida o una crema de verduras me quedaba demasiado aguachada. Ahora todo transcurre con una naturalidad abrumadora, debe ser que estoy aprendiendo, no? Sea como fuere no quiero que esto se convierta en un handicap para continuar con lo que me propuse en su día así que, tanto si me equivoco en la elaboración de las recetas como si no, continuaré narrándoos mis experiencias.

La de hoy no deja de ser una receta sencilla y de fácil elaboración que no quiero dejar de compartir con vosotros por lo excelente del resultado.

Ingredientes:

3 huevos
125 gr. de azúcar blanco
200 gr. de harina de repostería
1/3 de levadura
250 ml de nata líquida
200 gr. de fresas
1 cucharadita de extracto de almendras

Elaboración:

Precalentar el horno a 180 grados.

En un bol, mezclamos los huevos, el azúcar y el extracto de almendra.

A continuación, incorporamos la harina con la levadura y, por último, la nata líquida.

Cuando todos los ingredientes estén bien integrados, añadimos las fresas, cortadas por la mitad, o en rodajas si son fresas muy grandes, y vertemos el resultado en el molde.
Horneamos durante unos 45-50 minutos.

Como veis, todos y cada uno de los ingredientes que se requieren para llevar a cabo esta receta son muy fáciles de conseguir, aunque debo confesaros que no sé a qué se refiere eso de "extracto de almendras". Tampoco me molesté en buscarlo en el supermercado y lo substituí por azúcar de vainilla, que sí tenía en casa. No creo que se notara mucho en el resultado final.

Por otro lado, el tiempo de preparación es muy poco. Tendréis la masa lista en unos 7 minutos, aproximadamente. Después, el tiempo de espera hasta ver la tarta completamente terminada es mayor pero hay que tener paciencia y no dejar de vigilar en horno continuamente para evitar incidentes desagradables.

Espero que os guste.

miércoles, 28 de abril de 2010

SALCHICHAS A LA CERVEZA CON ACOMPAÑAMIENTO DE MANZANA CARAMELIZADA

Hoy me he levantado con energías renovadas. No sé si se debe al baño de sol que me di ayer o a que hoy es el gran día, el día de la remontada, el día en que jugadores y míster echaran el resto para quedar finalistas de la Liga de Campeones.

Bajo el lema "Ens hi deixarem la pell" los aficionados culés están dispuestos a apoyar a su equipo hasta el final porque, en ocasiones, la victoria no sólo está en el terreno de juego, muchas veces depende de la confianza que millones de seguidores depositan en su equipo, por eso hoy, la ciudad condal se viste de azul y grana para demostrar, más que nunca, que está con el Barça, porque todos deseamos llegar, y ganar, la final en el Bernabéu.
¡Suerte y a por todas!

Y como hoy es un día de grandes emociones no quiero complicaros con una receta dificultosa. La de hoy es una receta original, diferente y con mucho sabor.

Ingredientes:

8 salchichas
1 lata de cerveza
1 manzana
25 gr. de mantequilla
25 gr. de azúcar
Sal

Elaboración:

Ponemos las salchichas en una fuente apta para hornos y, a continuación, bañamos las salchichas con la cerveza hasta que queden completamente cubiertas.
Calentamos el horno a 200 grados y dejamos las salchichas hasta que se hayan dorado y la cerveza, prácticamente, se haya consumido.

Para el acompañamiento caramelizaremos la manzana que previamente habremos pelado y cortado en finos gajos.
En una sartén calentamos la mantequilla junto con el azúcar hasta conseguir un caramelo. Añadimos los gajos de manzana y los salteamos hasta que cojan un tono doradito.
Cuando las salchichas estén listas, sólo nos queda servir acompañándolas de los gajitos de manzana.

Como veis, es una receta original y diferente con la que, aunque parezca mentira, no tuve ningún tipo de complicación ya que es muy fácil de preparar.
Sólo tened en cuenta que, como no existe tiempo de permanencia de las salchichas dentro del horno, hay que estar continuamente pendiente para evitar que se consuma del todo la cerveza y se nos puedan quemar las salchichas.

Espero que os guste. ¡Buen provecho!

viernes, 23 de abril de 2010

DIADA DE SANT JORDI


El día de hoy me gusta especialmente.
Barcelona se llena de rosas y libros y multitud de personas pasean por sus calles dejándose embriagar por el agradable ambiente que se respira.
A pesar de que muchos se vanaglorian criticando este día por su afán comercial, creo que el espíritu de la diada de Sant Jordi es otro muy distinto. Hombres y mujeres se demuestran su amor regalándose rosas y libros, qué hay más bonito que eso.
Aunque hoy no voy a colgar ninguna receta, no quiero dejar pasar la oportunidad de felicitar desde aquí a todos los Jordis, Jordinas y Georginas, así como a todos los enamorados de esta fecha.

La leyenda

Dice la leyenda de Sant Jordi que
hace mucho mucho tiempo había
un dragón monstruoso, con largas
uñas y aliento de fuego. Este
dragón hacía huir al pueblo,
mataba a la gente con su aliento
y se tragaba vivas a las personas.

Los aldeanos, sin otra solución,
decidieron darle dos ovejas a
diario para apaciguar su hambre.
Cuando terminaron con las ovejas,
le dieron vacas, bueyes y todos los
animales que tenían, hasta que se
quedaron con ninguno.

El rey convocó una reunión, donde
decidieron que harían
un sorteo y le darían al dragón una
persona cada día, para
que se la comiese.
Un desafortunado día, le tocó a la
hija del rey, y él, entre
lágrimas dijo: -Perdonad a mi hija y,
a cambio, os daré todo
mi oro, mi argento y la mitad de mi
reinado, pero os los pido
por favor, dejad a mi hija.

El pueblo le negó, y el rey pidió ocho
días para llorar a su hija.
Llegado el día, el rey la vistió y la
dejó delante de la cueva,
cerca del dragón.
Pero de repente, cuando el
dragón ya abría su gran boca para
comerse de un mordisco a la
princesa, apareció, cabalcando
sobre un caballo blanco y con su
lanza y su escudo dorado el
caballero Sant Jordi, para salvar a
la princesa de las garras de aquel
enorme dragón.

Aquel caballero alzó su larga lanza
y de un golpe, el dragón cayó
desplomado al suelo, con la lanza
clavada en el centro del corazón.

De repente, de la sangre del
dragón que le brotaba cuerpo
abajo salió un rosal, con unas rosas
que brillaban con el esplendor del
sol, y de repente, el caballero Sant
Jordi cogió una, la más bonita de
todas, se dirigió a la princesa y se
la dio en señal de amor.
El rey le pidió que se casara con
su hija y que le daría todo su oro y
la mitad de su reinado.

Pero el caballero se marcho sobre
su caballo blanco sin decir nada.
Desde aquel día la gente del
pueblo vivió tranquila.

Es por eso que en el día de Sant
Jordi los hombres regalan una flor
a la persona que más quieren, y
las mujeres un libro.

No hace falta que las leyendas
sean ciertas, tan solo hace falta
que sean bonitas.

Espero que os guste.

martes, 20 de abril de 2010

BIZCOCHO CON LIMÓN Y CANELA

Hoy no me apetecía mucho escribir. La verdad es que ando un poco apática con todo esto del paro, la ausencia de trabajo, de prestación económica, la incesante búsqueda sin resultados... No sé, esta situación me desequilibra. Tengo mis momentos, claro. No todos los días son negros, algunos son grises, incluso grises perla pero, blancos, lo que se dice blancos, hay pocos, muy pocos.
Cada día me levanto con la esperanza de recibir alguna llamada que me de la oportunidad de optar a un puesto de trabajo que se ajuste, tanto a mis expectativas como a mis conocimientos y experiencia pero, los días se suceden y nada. No sólo no hay oportunidades sino que tampoco hay llamadas. Un fiasco, vamos.
Aprovecho para hacer un llamamiento desde aquí a todos aquellos que pudieran ayudarme. Ya no se trata de encontrar trabajo para ganar dinero, que también, es más bien la necesidad de sentirse útil, de que no se pasen los días de balde. Tampoco significa que me tire los días tumbada a la bartola, viendo la tele o mirando las musarañas. Es otro tipo de actividad la que empiezo a necesitar de forma desesperada.
En fin... vayamos al bizcocho que es lo que hoy nos ocupa.

Ingredientes:

1 yogur natural
Aceite de oliva
Azúcar
Harina
2 huevos
Levadura
Ralladura de limón
Mantequilla
Canela en polvo

Elaboración:

Tomaremos como medida el yogur y mezclaremos en un bol el yogur natural, 1 de aceite, 2 de azúcar, 3 de harina, los huevos, la ralladura de limón y la levadura.
Untamos un molde con mantequilla para evitar que se nos pegue el bizcocho y vertemos la masa.
Espolvoreamos con azúcar y canela y horneamos durante unos 25 minutos.

Parece fácil, no? Pues de fácil nada de nada. Bueno, es cierto que la elaboración no tiene mayor complicación, sólo hay que mezclar, en un único paso, todos los ingredientes en un recipiente apto para ello. La dificultad radica en darse cuenta de que si espolvoreas la masa, antes de hornear, con el azúcar y la canela, el bizcocho se quema por su parte superior y se queda crudo en el interior. Con lo que hay que terminar con el bizcocho en la basura porque ya no tiene remedio.
Eso fue lo que me pasó la primera vez que quise sorprender con esta receta.
Decidí intentarlo de nuevo. Esta vez puse la masa a hornear sin el azúcar y sin la canela, y cuando quedaban pocos minutos para retirarlo del horno, espolvoreé ambos ingredientes y lo introduje de nuevo para que el bizcocho se impregnara de ellos.
Esta vez sí conseguí el resultado deseado. Un esponjoso y delicioso bizcocho, ideal para acompañar con café.
Como veis, también en cuestiones culinarias, hay que saber usar el sentido común. Era lógico que se quemara el azúcar. Su grado de cocción es inferior al de la masa, por lo tanto, no podría haber resistido intacto durante todo el tiempo que durara la cocción del bizcocho.
Como dijo Charles Dickens: "Cada fracaso enseña al hombre algo que necesitaba aprender".
He aprendido la lección: a partir de ahora leeré todas las recetas que quiero cocinar aplicando el sentido común.
Que vagi de gust!!